Buscar este blog

jueves, 14 de octubre de 2010

Insólita canción

Sigo buscando
Saciar mis ganas vacías
De querer sumergirme y ahogarme
En tu fachada de enigma fantasioso
Misterio maldito
Misterio maldito…

Yo sé que no sos lo que busco
Yo no sé que estoy buscando
Ni porque quiero buscarlo en vos
Quiero conocerte
Para dejar de pretenderte
Quiero encontrar tu fibra intocable
Y saber que jamás, podrás erizar la mía
Mas allá de este sentimentalismo adolescente tardío…
Nunca tardé, nunca caí, nunca sepulte la verdad
Y tengo ansias de caer, y me protejo solo en Su fuerza;
Veo tu rostro y quiero más
No sé que es ese más que quiero
Solo sé, no será allí…
Donde tenga que seguir buscando…

Que fatiga incomprensible solo sostenida por la fe
Buscar lo perfecto en  lo imperfecto
He allí porque el hombre es un conflicto sin solución;
Creado imperfecto, a semejanza de lo perfecto
Tendiendo su corazón a lo perfecto
Teñida su humanidad de miseria y debilidad…

Su anhelo voraz de quererlo todo
Su confinada índole, su fragilísimo carácter…
Tanto coraje, y tan poca capacidad…

Tanta pasión, tan alto afán
Sin manos ni pies voladores…
“hasta el pelo de vuestra cabeza está contado”
No existe en nosotros humildad suficiente
Para reconocer este misterio de amor…

Sembrados en una maceta;
Una tierra rica, húmeda, cálida,
Tierna, Colmada…
Tirados al destierro,
Para madurar a fuerza,
Para vestirnos cada uno de un único color
Y parir pedazos de nuestra esencia dramática:
Nuevas canciones
Nuevas historias
Nuevos poemas
Nuevos discursos
Nuevas formas de gritar,
De llorar… de agradecer…
De amar…

Pareciera que pasáramos la vida
Vislumbrando solo un destello de la belleza
Todo es signo que remite, a lo insólito…
A lo urgente…
Formándose el alma en ardua manía:
Vislumbrar y fundirse en la Belleza última,
Alguna vez…

Duele el alma duele
Mientras vamos intentando encontrar la maceta
En esta jungla  de realidades a medias…
Intentamos hallar lo perfecto en lo imperfecto
Lo eterno en lo mortal, en lo pasajero, en lo banal…
Desgastándose así ella, en mil intentos fallidos…

Que mi perfume desde aquí te alegre
-Pintor de mis deseos-
Voy haciéndome más bella para ti,
-Si bien mi voluntad es frágil
Puedo entregarte mi fragilidad-
Para ser digna HOY y en posterioridad
De regresar a perfumar tu Edén
Como una orquídea morada y febril

Sálvame de la tentación  de poner mi corazón
En una maceta de plástico, de carne perecedera…

Sálvame de la diabólica postura
De creerme autosuficiente e invencible…

Hacia ti late mi espíritu;
No permitas que el viento se lo lleve…

Hacia ti va entonado mi canto;
No permitas que pierda la inspiración,
Conciencia divina…

Para ti va guardada mi inocencia;
No permitas que nadie me la quite…

Hacia ti va dirigida mi mirada;
No permitas que nada me ciegue…

Hacia  ti dirigido Mi Amor;
No permitas que nadie te lo robe…

¡Mi felicidad QUIERE residir en Ti!
-es un clamor casi sangrante-
Aun consciente de mi naturaleza infecunda
Clamo sin miedo, en medio de tanto temor,
Apelo a mi origen todopoderoso:

Muéstranos tu Rostro Señor,
Y nos salvaras…”
Nathalia Lorena González

No hay comentarios:

Publicar un comentario