Numen...
Venía de dádiva a tu corazón agrietado que ve su lamento oscuro,
Al querido hermano poesía, que engalana el dolor izquierda.
Centauro viviente en pedestal de ninfa diáfana y blanca.
Te regalo esta triste rosa, musa de ocasión, cenicienta de cuento y ficción.
Esperando estas, tu beso de amor,-En la cofradía falsa del destino ya no! Vive vehemente médula de amor,-
Vive por la hostia infinita de tu ser, que pide a gritos que seas la preciada alquimia,-
Mística e infinita,-
No permitas que ningún arcano te robe tu leyenda,-
Marca el enigma muerto y desnudo,-
Sana la llaga que ese veneno provoco, Tú sabes cuál es el bálsamo para el corazón...
Vane Balbuena